viernes, 15 de febrero de 2013

Weingut Robert Weil, Riesling, 2007...



 Hoy me permito compartir con ustedes, datos de esta pequeña botella de 375 ml. de un vino que gracias a una de mis hermanas  está hoy en día en nuestro poder.

Son 3 años aproximadamente desde que está en mis manos  y llegó la hora de ser abierta.  Antes de ello como comenté al inicio quiero compartir con ustedes un poco sobre este gran Riesling Alemán. 



Weingut Robert Weil. Riesling.


Su nombre:


WEINGUT ROBERT WEIL 2007, RIESLING,  KIEDRICH GRÄFENBERG. AUSLESE. 



Weingut Robert Weil cuenta con muy altos estándares para sus operaciones tanto en  el viñedo como en la bodega.  Utiliza actualmente técnicas muy modernas donde combina métodos probados de la vinificación tradicional para preservar y aprovechar plenamente el potencial de lo que la naturaleza ofrece, donde las uvas son cosechadas y  manejadas con la mayor suavidad posible, hasta el control total de sedimentación natural y la decisión de generar la fermentación lenta  a temperaturas totalmente controladas  en barricas de roble o en depósitos de acero inoxidable.  Todo esto logra generar un dulzor residual muy fino con un vino estéril que se filtra y se embotella tan suave como sea posible con el fin de retener los maravillosos aromas primarios de la uva y para el envejecimiento posterior en botella.  

Los viñedos de Weingut Robert Weil  buscan explotar el potencial natural de los mejores sitios.  La gama de vinos va desde vinos básicos de calidad embotellados bajo la etiqueta de bienes Weil  como son los Gustwein y Ortswein  pasando por vinos Riesling de Erste Lage (sitio top) tal como los Kidricher Klosterberg  y Tumberg Kiedricher  y Grosse Lage hasta el más fino y superior de los sitios tal como es el Kiedricher Gräfenberg.

Esta distinción marca el regreso a la práctica de un siglo atrás, cuando  sólo los mejores vinos llevaban el nombre de un sitio especifico y todos los demás eran vendidos bajo los nombres de dominio o del pueblo.

Es un vino elegante y complejo con muchos matices de sabor y pronunciado aroma frutal.  Hay una perfecta interacción entre la acidez y el dulzor natural. Este equilibrio es el sello distintivo de la uva Riesling.





Encontramos un vino dorado, con aromas que representan inmediatamente a un vino dulce, y en boca un caldo totalmente envolvente, untuoso, con sabor a miel pero con una particularidad de no ser tan dulce, es como tener en boca una fruta madura que no empalaga.

Indudablemente un gran vino .....

Esta, una gran noche, solo junto a mi esposa, y acompañando este vino con unos mejillones en vino blanco , consome de pescado , ajo porro y cebollin.

Adicionalmente como se puede observar en la foto pudimos disfrutar de una escalivada y escargot al ajillo.

En resumen  y en pocas palabras...

Gran noche.......








Vicente A. González H.


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